Antes de nada hay que decir que no nos podemos llevar a engaño en este tema. A pesar de que muchas personas consideren que están perfectamente formadas en todo lo que tiene que ver con el mundo de la sexualidad no solo no es así sino que si somos objetivos, podemos decir que todavía nos queda mucho camino por recorrer. Es por ello por lo que artículos como este no hacen otra cosa que aclarar muchos conceptos que se creen sabidos pero que en el fondo no solo no lo están sino que generan mucha confusión.

Lo primero que tenemos que saber es que la píldora del día después no se puede considerar, en absoluto, como un método anticonceptivo. Es cierto que en muchas ocasiones puede haber personas jóvenes, sobre todo adolescentes, que lo consideran así pero tenemos que ser muy tajantes en este sentido. No lo es más que nada porque no se ha concebido así y por lo tanto no lo va a ser. Una primera directriz que tenemos que tener muy clara si queremos seguir avanzando dentro del conocimiento de este tema que es mucho más profundo de lo que nos podamos imaginar siquiera.

A pesar de que es cierto que a día de hoy en internet existen portales con mucha información como puede ser el caso de http://pildoradeldiadespues.es/ entre otros, lo cierto es que siempre que una mujer tenga que recurrir a esta alternativa, lo mejor que puede hacer es recibir todo el asesoramiento posible por parte de dos persona muy importantes como son sus padres y como puede ser un profesional. Por mucho que creamos saber lo que estamos haciendo siempre es importante poder contar con la mayor cantidad de información posible ya que solo así es como sabremos si estamos actuando correctamente.

Para terminar tenemos que hablar del hecho de que hay que tomar conciencia sobre lo que estamos haciendo. Una pastilla de este tipo no es otra cosa que un torrente de hormonas que entra a nuestro organismo de una manera altamente invasiva. Es por ello por lo que tenemos que estar muy bien informadas sobre todo porque pueden ser muchos los efectos secundarios los que se pueden producir. Unos efectos que si bien es cierto que varían en cada mujer, podemos decir sin lugar a dudas que en algunos casos pueden llegar a ser muy severos por lo que merece la pena prestarles atención desde el primer día.